Hoy, 30 de septiembre de 2010 es día de conclusiones, cifras y evaluaciones de daños; y digo daños porque la que se montó ayer en Barcelona fue campal.
Mientras los sindicatos, gobiernos y patronales difieren en datos, los titulares de la prensa reflejan lo que ayer se vivió en la huelga general. Unos hablan de éxito rotundo, otros de total normalidad, pequeños "parones" en las grandes fábricas...y el estrepitoso caso de la capital condal. Y es que, en Barcelona, ayer se armó una buena; yo no supe nada hasta las 9 y pico de la noche que me llamó una amiga que vive en los alrededores de Plaza Cataluña y Ramblas y en un tono entre anonadada y preocupada me dijo lo siguiente: "Angie, esto es una batalla campal; enciende la tele, están quemando de todo y asaltando los comercios". Y, efectivamente, como habréis podido ver en los telediarios, a unos cuantos (y me callo el adjetivo que les colocaría, porque no es plan de faltar a nadie) les dio por quemar contenedores, coches de policía y romper lunas de comercios. No se conformaron con las barricadas durante el día ni los impedimentos para acudir al trabajo durante la jornada...ellos tenían que llamar la atención de alguna manera más.
Por otra parte, hubo una gran manifestación en la capital, que por el momento, creo se cerró sin incidentes y con una gran afluencia de personas. Esto deja mucho que pensar, porque si todas esas personas se unen por una misma causa...¿será que algo se está haciendo mal?, ¿quién es el culpable?, ¿nos quejamos demasiado y evitamos responsabilidades? Son muchas las preguntas que te puedes hacer el día después de uno como el de ayer...actos que marcarán historia y que así como nosotros estudiamos la caída del Franquismo, nuestros sucesores, estudiarán esto como algo significativo dentro de las idas y venidas de nuestra economía y política estatal.
Y hasta en la BBC se hacen eco de lo que está pasando en Europa...os dejo el link para que veáis las fotos que publican hoy en su página BBC News
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